viernes, 23 de enero de 2015

Mujeres virgenes

En medio del silencio, seguía escuchando el odioso sonido al teclear, cada vez más rápido, más fluido, casi tanto como la excitación que me inundaba, y me hacia acariciar mis pechos y a acercarme hasta ti.

Mis manos se posan en tus hombros, intentando relajar cada uno de tus músculos. Mis labios en tu cuello, y mis pechos buscaban desesperadamente cualquier parte de tu cuerpo. Reaccionas; al fin, sonríes, dices algo, no te entiendo, o no Mujeres virgenes hacerlo, pero detecto pocas ganas de resistirte…pocas como siempre.

Miro tu pantalla, y voy susurrando al oído todas las palabras nada excitantes que te han escrito, mis manos recorren tu cuerpo, y de mi labios empiezan a brotar las frases que no leo, las que quiero que oigas, te describo lentamente cada una de las cosas que me apetecen en ese momentos.
http://www.barbump.nl/

Tus manos se relajan, y ya no presionan nada más que mi cuerpo y mi avidez, intentando asirlo, mientras yo descubro parte de mi cuerpo para ti, y me hago dueña de todo tu campo visual. Trato que las mantengas quietas, por ahora. Dejo que sólo tu lengua juegue conmigo, y que sea tu mirada, la que me acaricia por encima de la falda, por entre mis bragas. Incidiendo directamente en mí deseo. Contando con mis dedos como cómplices, de lo que quieres hacer, y aunque me muero porque a sí sea, no te dejo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario